Blitz está muy mona cuando se queda dormida. Entonces, se le pueden incluso hacer fotos sin que salgan borrosas. Últimamente, eso sucede muy poco. No es que no duerma, sencillamente es que lo hace en sitios inaccesibles.
Después de dos meses de "reformas" en casa, Blitz ha encontrado nuevos sitios donde esconderse, donde estar a oscuras un montón de horas, mientras le gritamos que le vamos a dar una pasa si sale.
Esta mañana, después de buscarla un buen rato, hemos visto toda la ropa de un cajón en el suelo. Estaba abierto, vacío... y ella, detrás. En el hueco, junto a un montón de juguetitos. Poco a poco, la vamos enseñando, aunque tengo muy claro que nunca aprenderá a volver a doblar la ropa y a meterla de nuevo en el cajón cuando termine de dormir. Pero sí a no asustar al pizzero cuando llama a la puerta, ni a asomarse a la ventana para ver los coches que pasan por la calle y sentir el aire fresquito que entra. Ya no se mete en la chimenea y ha aprendido a pedir agua para beber y a decirnos que quiere jugar.
No para. Corre persiguiendo pelotas todo el sábado y luego... se pasa todo el domingo durmiendo. De vez en cuando, se pasa por aquí o por el sofá, reparte un par de besos y se vuelve a la cama. Es así de mona.
Ayer, haciendo zapping, vi un trozo de El gran Lebowski. Había uno en una bañera y le echaban un hurón dentro. Empezaba a chillar. Espero que fuera un montaje.
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