Os presento a Blitz

Mi hurona se llama Blitz. Blitz, en alemán rayo, relámpago, flash. Es masculino, pero ella, mi Blitz, no lo sabe. Es una nena preciosa. Una panda, castrada, dicen que nació en diciembre.

Llegó a casa el 16 de febrero. Intenté hacerle fotos, y digo que lo intenté porque lo máximo que conseguí fue una mancha marrón, peluda y muy movida en medio de la pantalla. Poco a poco, cuando se dormía en su jaula, a través de los barrotes... Ahora ya se está quietecita cuando ve la cámara. ¿Será porque le hemos hecho más de doscientas fotos? Es una más de la familia. Es nuestra nena.

La primera noche daba vueltas en la jaula. No encontraba la postura para dormir. Estaba echada en la arena y no conciliaba el sueño. Se cambiaba de sitio y volvía a dar vueltas. Se durmió... debajo de la botella. ¡Ja! No es hermética: va soltando una gotita de vez en cuando. ¡Chof! En la cabeza. La cogí y la subí a su cama: una hamaca colgada del techo de la jaula. Parece que le dio miedo y se subió a mi brazo para que la bajara. Se acurrucó en el mismo sitio y le cambié el grifo de lado. Se durmió. De madrugada... un ruidito. Arenilla que se mueve. Un trompazo. Arenilla otra vez... y silencio.

Cuando nos levantamos... estaba durmiendo en su camita, colgadita del techo y bien calentita. ¡Pero qué leche se metió en el primer intento!

Mañana, más

Un kisss

Yanara